Una mujer acude a la comisaría para denunciar una agresión que aún no ha ocurrido. Se trata de una clarividente que afirma comunicarse con los espíritus. Mientras Morgane y Karadec intentan por todos los medios seguir trabajando en equipo y ocultar la nueva naturaleza de su relación, Daphné se inicia en el espiritismo y lo que parece ser un engaño se convierte rápidamente en la búsqueda de un asesino a sangre fría.